Este año de la serpiente parece venir cargado de muchos cambios, para bien, para mal...
Enfrentar los cambios es un reto que, a muchos, nos cuesta trabajo.
La teoría del espiral ascendente dice que, ante los cambios, nuestra actitud es la que define si las cosas serán para bien o si las cosas serán para mal.
El miedo, la inseguridad, el apego, la histeria, el rencor, la furia, el enojo, la soberbia son cualidades ante el cambio que nos toman por la espiral -descendente-y que tornan nuestro entorno agresivo y destructivo. Todo lo que va a morir, regresa a la Tierra por la espiral descendente.
La fé, la confianza, la fortaleza, el amor, la libertad, la incondicionalidad, el agradecimiento, la entrega ante el cambio son energías que toma la espiral ascendente para liberarnos de esas personas o esas circunstancias y regalarnos plenitud. Todo lo que va hacia el Cielo, hacia Dios, toma la espiral ascendente.
Pero y qué hace la espiral descendente?
Ah, pues, la espiral descendente se conecta con la ascendente para entregarle a Dios, la energía para que la transforme y la regrese.
Un cadáver de animal, se desintegra en la tierra, se pulveriza y todos los minerales que secreta son absorbidos por la tierra de manera tal, que garantizará la fertilidad de la misma.
Así todo.
Así todos.
 |
| el camino del Buda: la libertad |
Tintes de maldad y bondad, podrá ser.
Tenemos el compromiso, con nosotros mismos, con el Creador y sus creaciones de seguir andando...
A pesar de.
Namaste.
Maravilloso, como siempre!
ResponderEliminar