viernes, 23 de mayo de 2014

UN MILAGRO TRAS OTRO

Estamos acostumbrados a pensar que Dios vive fuera de nosotros.

Estamos acostumbrados a orar a Dios en un templo.

A buscarlo en imágenes o en ídolos.

Cuándo decimos que Dios nos creó a su imagen y semejanza ¿no cabrá la posibilidad de que nos haya heredado también la capacidad de ser como El?

Pienso que sí.

Pienso que heredamos absolutamente todas las cualidades de Dios.
Lo que sucede es que, a medida que crecemos, vamos olvidándonos de nuestro verdadero Ser y empezamos a convertirnos en un alocado collage de lo que coleccionamos del mundo.

El mundo, como tal, es una ilusión.

Así que lo que creemos que somos al final, también lo es.

No somos nada de lo que llevamos puesto ni somos nada de lo que decimos, ni siquiera somos el nombre que nuestros padres nos dieron.

Somos mucho más.

Somo infinitamente más.

Estoy segura que los milagros que queremos que nos pasen en la vida los podemos hacer suceder o no.

Todo depende de que tan adecuada es nuestra conexión con la Fuente Infinita de Luz que está siempre ahí para nosotros.

Si nuestra conexión es eficiente, sabremos traer al plano material lo que necesitamos, lo que nos hace falta.

Si nuestra conexión no es eficiente será difícil de lograr.

Pero...

¿Cómo logro una conexión eficiente?

Pues como todo, en la vida, es personal pero, déjenme les digo que la búsqueda de la conexión con la Luz en mi caso lleva moviéndome de un lado a otro desde los 5 años de edad.

Hoy me encuentro en un momento de Plenitud y Gracia y la herramienta que en lo personal me ha hecho estar más cerca de la Fuente de Luz es la Kabbalah.

Para mí la Kabbalah ha sido una guía y una compañía en mi búsqueda Espiritual.

Ha sido un manantial de agua sagrada del que bebo a borbotones paz y tranquilidad.

Hoy, descansa mi alma en el camino que poco a poco está sabiduría milenaria me va marcando.

Hoy, gracias a esta herramienta he vivido, en lo personal dos milagros.

Dos milagros que creí imposibles.

Alguien a quien amo está recuperándose de una terrible y agotadora enfermedad y mi cuerpo está regresando poco a poco al Origen.

Para quien quiera entrar en el Mundo de lo Desconocido, el mundo del 99% aconsejo, irrevocablemente, esta estrategia.