AMBAR (adiós inflamación)

Hemos hablado un poco de las propiedades curativas de las piedras.
Quizá muchos de ustedes son incrédulos y piensan que las piedras no tienen ningún poder curativo.

Tengo una explicación bastante científica de por qué las piedras sí tienen un impacto en nuestro cuerpo físico.

Regresemos, por un momento, a la secundaria.
En esa época nos introdujeron un concepto muy particular: el átomo.

El átomo es la partícula más pequeña del mundo. El principio de todo, los átomos tienen protones, electrones y neutrones girando y estos pueden sumarse o restarse con protones, electrones y neutrones de otros átomos.

Ese mundo de sumas y restas microscópicas constituye todo lo que eres, todo lo que existe.

Bueno, pues las piedras también estas constituidas de átomos ¿cierto?

Cierto, todo lo que existe está constituido de átomos.
Si el mundo atómico es de sumas y restas, entonces ¿los protones, electrones y neutrones de una piedra se suman y restan a mis protones, electrones y neutrones?

SI!!!

Acabas de comprender por qué funcionan!+

Habiendo sacado eso de en medio quiero introducir ahora una que en realidad no es piedra sino resina y que tiene cualidades curativas extraodinarias:

El ámbar.
El ámbar es la resina de un árbol y tiene millones de años fosilizándose ya que, cae del tronco del árbol a la tierra, se une con lo que encuentra por ahí (minerales, insectos, plantas) y después, debido a las temperaturas, se solidifica.

El ámbar, en su composición química cuenta con un elemento muy especial, ácido succínico.

El ácido succínico es un antinflamatorio muy potente.

Si tu te pones una pulsera, collar de ámbar y éste está en contacto con tu piel, el calor de tu cuerpo (36.5º-36.7º) hará que el ácido succínico se libere, entrando por tus poros al torrente sanguíneo y circulando por todo tu cuerpo.

Al tiempo esta reacción irá desinflamando las células que estaban inflamadas en tu cuerpo, liberándote de alergias, inflamaciones crónicas y malestares extraños.

Es por esta cualidad que ahora muchos niños pequeños traen collares de ámbar cuando empiezan la dentición.

El ámbar desinflama las encías reduciendo las molestias de estos pequeños y haciendo la dentición más llevadera.

En mi lucha constante con la condición autoinflamatoria que padezco, he añadido ámbar a mis remedios cotidianos y pueden confiar en que digo la verdad cuando les confieso que estoy muy bien.

¿Dónde lo consigo?

Conmigo!
Ha sido tan bueno en mi proceso que me convertí en distribuidora de ámbar del báltico certificado (es el que más concentración de ácido succínico tiene).

¿Precios?

Collares: $650.00
Pulseras: $450.00

Mis datos:
asesor.ayurveda@gmail.com
0445554199492

Que tengan un hermoso y bendecido día.
Sat Nam.
M.